Pero ¿Dios es progresista o conservador?
- Alberto Terrer
- 23 jul 2023
- 5 Min. de lectura
Para comenzar, como titular, diría que Dios es total y perfectamente progresista.
Diría que no tiene nada de Conservador. Absolutamente nada.
Pero esto solo se puede afirmar si entendemos quién es Dios y que busca.
¿Es que Dios busca algo? Te preguntarás.
Estoy convencido de que sí. Rotundamente, sí.
Dios es la totalidad. La Unidad. Infnito y Eterno.
Es la Presencia.
En el origen, Dios estaba en calma, en una paz absoluta.
Pero comenzó la existencia.
Y, comenzó por un solo motivo. La fragmentación.
La fragmentación es un concepto complejo, por las profundas implicaciones que tiene.
La fragmentación, para poder entenderlo de una manera “fácil”, es como si la mente de Dios se disociara y comenzara a soñar.
Es decir, imaginemos que esa mente pasa a ser dos mentes que coexisten en un sueño, y que cada una de ellas interactúa con la otra, pero no sabe que, en realidad, ambas son la misma.
Y, no lo saben porque solo se sienten a sí mismas.
Esta fragmentación crea dos Identidades.
Cada una de estas dos Identidades nace y no tiene ningún tipo de conocimiento sobre nada en absoluto.
Simplemente, abre los ojos en el Universo y comienza a experimentar.
Más tarde, por la replicacion, estos seres pasarán de dos a un número que tiende a infinito.
En un sueño, nadie teme quedarse atrapado porque los sueños llegan a su fin ¿No?
En el peor de los casos, si estuvieras atrapado en un sueño y quisieras despertar, simplemente intentarías morir y ¡Pum!
Al instante siguiente estarías despierto.
Pero no sucede eso con la mente de Dios.
No sucede por dos motivos fundamentales.
El primero es que coexisten varios soñadores simultáneos. Para despertar no debe morir uno, sino, todos. En ese caso, cuando ya no existieran soñadores, debería despertar ¿No?
En teoría sí, pero yo afirmo que no.
¿Por qué?
Porque tú despiertas de un sueño porque hay una Realidad que lo sostiene. Es decir, tienes un sueño dentro de otro sueño.
Cuando duermes, puedes finalizar el sueño, simplemente, despertando.
Pero ¿Acaso puedes despertar del sueño al que llamamos Realidad, simplemente muriendo?
No, no puedes.
Y ¿Sabes por qué?
Porque eres Dios.
Ese es el gran problema. Que eres Dios y no lo sabes.
Cada manifestación de la vida es Dios, atrapado en un sueño del que no puede despertar.
Condenado a vivir una eternidad sin poder despertar.
Dios está experimentando cada vida. Por tanto, experimenta cada nacimiento y cada muerte.
Cada instante de terror, así como de felicidad.
Pero, siempre, siempre, siempre, llega el sufrimiento.
No solo eso. Dios se devora a sí mismo sin cesar. Se depreda sin saber que se está matando y comiendo a sí mismo.
No hay nadie más.
Así que, llegados a este punto, podemos hacernos la siguiente pregunta ¿Dios estará atrapado para siempre?
La respuesta es esta: No.
Porque tan pronto como se inició la existencia, el sueño, se inició también el proceso de desfragmentación.
La Voluntad de Dios es despertar.
Y, esta voluntad se manifiesta en la Inteligencia Inconsciente. He hablado mucho sobre ella en muchos artículos de esta web y en mi libro Creo un Dios.
La Inteligencia Inconsciente va a llevar a cabo unas acciones para despertar.
Básicamente, y simplificando todo lo posible, la única manera de que Dios despierte es decidiendo hacerlo.
Y, para ello, todos los fragmentos deben decidir hacerlo.
A la vez.
Todos, sin excepción.
¿Te imaginas algo así?
Si solo fuera humanos, aún podría hacerse. Pero no.
Cada forma de vida es Dios.
¿Cómo van a decidir los virus y bacterias despertar?
¿Despertar de qué? Para ello deberían saber que están soñando.
Solo hay una manera de despertar, que es tomando una decisión unánime de hacerlo.
Y, la única manera es que esa decisión la tome un solo ser, que sepa que está soñando.
Un solo ser que sepa quién es, en realidad.
El Ser Supremo.
Para ello, todos los seres deben agruparse en uno solo, dejando de ser ellos mismos, transfiriendo su Identidad y su voluntad a ese único Ser.
¿Te parece increíble?
Pues estás formado/a por billones de seres que te han transferido su voluntad. Esas células han dejado de ser ellas para ser tú.
Si mueres, mueren contigo.
El único objetivo de la vida, el único anhelo de Dios, es que emerja el Ser Supremo.
El Ser de seres.
Y, esto solo se puede lograr de una manera.
Solo una.
Esa manera es la agrupación perfecta.
Para que varios seres deseen formar uno nuevo, deben decidir hacerlo. Deben transferir su voluntad e Identidad a un Ser Superior.
Las hormigas son un intento inconsciente de hacer esto.
Y una manada de lobos.
Y un bosque.
Y una colonia de bacterias.
Y, sí, una ciudad humana.
Incluso un continente humano.
Para que cada fragmento, cada ser, decida transferir su voluntad, ha de hacerlo a la vez que el resto.
Este proceso es la colectivización.
Y, ahora podemos responder a la pregunta inicial.
¿Dios es conservador o progresista?
De estas dos morales ¿Cuál dirías tú que es inclusiva con los diferentes y cuál es exclusiva con ellos?
Es decir ¿Cuál de estas dos ideas morales incluye a los colectivos diferentes y cuál se aisla de ellos?
El antiespecismo es el reconocimiento de toda forma de vida como igual a la mía, solo porque viven. También podríamos llamarle Biocentrismo.
Sin excluir a ninguna forma de vida.
¿Por qué crees que se desarrolla esta idea moral? ¿De dónde crees que salen todas estas ideas?
Solo hay una mente, la de Dios. Solo hay un deseo, el de despertar.
Cuando una Identidad, un fragmento, expone una idea progresista, es Dios intentando convencerse a sí mismo.
Cuando expone una idea conservadora, también es Dios convenciéndose a sí mismo.
Más bien, es la Identidad resistiéndose a los cambios que le susurra Dios.
Pero es que, cuando Dios se manifiesta como un ser vivo, no sabe que Él es Dios. Está atrapado en un sueño. Tiene recuerdos fugazes, ideas inspiradoras, las cuales han moldeado el mundo.
Si cada ser supiera que es Dios, jamás excluiría a otro ¿Cómo va a excluirse a sí mismo?
Jamás se haría ningún daño ¿Cómo va a matarse o devorarse a sí mismo?
¿Qué crees que haría? Se cuidaría, se arroparía, intentaría mitigar el dolor y el miedo.
Viviría en paz con el resto de seres.
Si los seres supieran que son Dios ¿Acaso no vivirán en paz entre ellos?
Eso es el Edén.
El Progresismo perfecto supone la igualdad perfecta entre los seres. Nadie es merecedor de nada, sino que todos somos Uno.
Dios es perfectamente progresista porque Dios es cada ser y nunca se discriminaría a sí mismo. Nunca se generaría sufrimiento a sí mismo, si supiera quién es, en realidad.
Las células que forman a un ser pluricelular ya saben que son Dios. Por eso, han dejado de ser ellas mismas y forman un Ser Superior.
Ahora, Dios intenta que la moral progresista ayude a todos los seres a seguir avanzando en la transferencia de Identidad hasta que solo exista un ser.
El Ser de Seres.
Y una sola Voluntad.
Cuando el Ser Supremo emerja, cuando abra los ojos, Dios despertará.
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